26 de abril de 2013

Viernes de la 4ª semana de Pascua. Ciclo C.



SOBRE LITURGIA

CALENDARIO


26 VIERNES. SAN ISIDORO, obispo y doctor, Fiesta


Misa de la fiesta (blanco).

bl MISAL: ants. y oracs. props., Gl., Pf. props.
LECC.: vol. V.
- 1Co 2, 1-10. Vuestra fe se apoya en el poder de Dios.
- Sal 118. R. Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero.
- Mt 5, 13-16. Vosotros sois la luz del mundo.



TEXTOS MISA


26 de abril
SAN ISIDORO, OBISPO Y DOCTOR DE LA IGLESIA
Fiesta
COMMUNE DOCTORUM ECCLESIAE 1
Antífona de entrada Sb 6, 13
Radiante e inmarcesible es la sabiduría; fácilmente la ven los que la aman y la encuentran los que la buscan. Aleluya
Antiphona ad introitum Cf. Qo 15, 5
In médio Ecclésiae apéruit os eius, et implévit eum Dóminus spíritu sapiéntiae et intelléctus; stolam glóriae índuit eum (T.P.allelúia).
Se dice Gloria.Dicitur Gloria in excelsis.
Oración colecta
Señor, Dios todopoderoso, tú elegiste a San Isidoro, obispo y doctor de la Iglesia, para que fuese testimonio y fuente del humano saber; concédenos, por su intercesión, una búsqueda atenta y una aceptación generosa de tu eterna verdad. Por nuestro Señor Jesucristo.
Collecta
Omnípotens aetérne Deus, qui beátum N. (epíscopum) Ecclésiae tuae doctórem dedísti, praesta, ut, quod ille divíno affátus spíritu dócuit, nostris iúgiter stabiliátur in córdibus, et quem patrónum, te donánte, ampléctimur, eum apud tuam misericórdiam defensórem habeámus. Per Dóminum.

LITURGIA DE LA PALABRA

Lecturas propias de la fiesta de San Isidoro, obispo y doctor de la Iglesia

PRIMERA LECTURA

Vuestra fe se apoye en el poder de Dios 

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 2, l-l0

Yo, hermanos, cuando vine a vosotros a anunciaros el misterio de Dios, no lo hice con sublime elocuencia o sabiduría, pues nunca entre vosotros me precié de saber cosa alguna, sino a Jesucristo, y éste crucificado.
Me presenté a vosotros débil y temblando de miedo; mi palabra y mi predicación no fue con persuasiva sabiduría humana, sino en la manifestación y el poder del Espíritu, para que vuestra fe no se apoye en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.
Hablamos, entre los perfectos, una sabiduría que no es de este mundo ni de los príncipes de este mundo, que quedan desvanecidos, sino que enseñamos una sabiduría divina, misteriosa, escondida, predestinada por Dios antes de los siglos para nuestra gloria.
Ninguno de los príncipes de este mundo la ha conocido; pues, si la hubiesen conocido, nunca hubieran crucificado al Señor de la gloria.
Sino, como está escrito: «Ni el ojo vio, ni el oído oyó, ni el hombre puede pensar lo que Dios ha preparado para los que lo aman.»
Y Dios nos lo ha revelado por el Espíritu. El Espíritu lo sondea todo, incluso lo profundo de Dios.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.

SALMO RESPONSORIAL
Sal 118, 99-100. 101-102. 103-104

R. Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero.

Soy más docto que todos mis maestros,
porque medito tus preceptos.
Soy más sagaz que los ancianos,
porque cumplo tus leyes. R.
Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero.

Aparto mí pie de toda senda mala,
para guardar tu palabra;
no me aparto de tus mandamientos,
porque tú me has instruido. R.
Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero.

¡Qué dulce al paladar tu promesa:
más que miel en la boca!
Considero tus decretos,
y odio el camino de la mentira. R.
Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero.

ALELUYA
Mt 5, 16
Alumbre así vuestra luz a los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre.

EVANGELIO

Vosotros sois la luz del mundo 

+ Lectura del santo evangelio según san Mateo 5, 13-16
Gloria a ti, Señor.

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
-«Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán?
No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente.
Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte.
Tampoco se enciende una lámpara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa.
Alumbre así vuestra luz a los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en el cielo.»

Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.

Del Catecismo de la Iglesia Católica


Las características del Pueblo de Dios
782 El Pueblo de Dios tiene características que le distinguen claramente de todos los grupos religiosos, étnicos, políticos o culturales de la Historia:
 - Es el Pueblo de Dios: Dios no pertenece en propiedad a ningún pueblo. Pero El ha adquirido para sí un pueblo de aquellos que antes no eran un pueblo: "una raza elegida, un sacerdocio real, una nación santa" (1P 2, 9).
 - Se llega a ser miembro de este cuerpo no por el nacimiento físico, sino por el "nacimiento de arriba", "del agua y del Espíritu" (Jn 3, 3-5), es decir, por la fe en Cristo y el Bautismo.
 - Este pueblo tiene por jefe [cabeza] a Jesús el Cristo [Ungido, Mesías]: porque la misma Unción, el Espíritu Santo fluye desde la Cabeza al Cuerpo, es "el Pueblo mesiánico".
 - "La identidad de este Pueblo, es la dignidad y la libertad de los hijos de Dios en cuyos corazones habita el Espíritu Santo como en un templo".
 - "Su ley, es el mandamiento nuevo: amar como el mismo Cristo mismo nos amó (cf. Jn 13, 34)". Esta es la ley "nueva" del Espíritu Santo (Rm 8, 2; Ga 5, 25).
 - Su misión es ser la sal de la tierra y la luz del mundo (cf. Mt 5, 13-16). "Es un germen muy seguro de unidad, de esperanza y de salvación para todo el género humano".
 - "Su destino es el Reino de Dios, que el mismo comenzó en este mundo, que ha de ser extendido hasta que él mismo lo lleve también a su perfección" (LG 9).


Oración sobre las ofrendas
Que estas ofrendas, Señor, fruto del trabajo del hombre, atraigan tus bendiciones y nos hagan dóciles al Espíritu de la verdad. Por Jesucristo nuestro Señor.
Super oblata
Sacrifícium tibi pláceat, Deus, in festivitáte beáti N. libénter exhíbitum, quo monénte, nos étiam totos tibi réddimus collaudántes. Per Christum.
Prefacio: El magisterio de san Isidoro
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro.
Porque nos concedes la alegría de celebrar hoy la fiesta de san Isidoro, y fortaleces a tu Iglesia con el ejemplo de su vida, la abundancia de su doctrina y la luz de su saber: de este modo la instruyes con su palabra y la proteges con su intercesión.
Por eso, nos asociamos al júbilo de los coros celestiales y, llenos de su misma alegría, proclamamos tu gloria, diciendo:
Santo, Santo, Santo...
PRAEFATIO DE SANCTIS PASTORIBUS
De praesentia sanctorum Pastorum in Ecclesia
Vere dignum et iustum est, aequum et salutáre, nos tibi semper et ubíque grátias ágere: Dómine, sancte Pater, omnípotens aetérne Deus: per Christum Dóminum nostrum.
Quia sic tríbuis Ecclésiam tuam sancti N. festivitáte gaudére, ut eam exémplo piae conversatiónis corróbores, verbo praedicatiónis erúdias, gratáque tibi supplicatióne tueáris.
Et ídeo, cum Angelórum atque Sanctórum turba, hymnum laudis tibi cánimus, sine fine dicéntes:
Sanctus, Sanctus, Sanctus...
PLEGARIA EUCARÍSTICA III.PREX EUCHARISTICA III.
Antífona de la comunión Sb 7, 13-14
Aprendí la sabiduría sin malicia, reparto sin envidia y no me guardo sus riquezas; porque es un tesoro inagotable para los hombres: los que la adquieren se atraen la amistad de Dios, porque el don de su enseñanza los recomienda. Aleluya.
Antiphona ad communionem Cf. Ps 1, 2-3
Qui meditábitur in lege Dómini die ac nocte, dabit fructum suum in témpore suo (T.P. allelúia).
Oración después de la comunión
A los que has alimentado con Cristo, pan de vida, ilumínalos, Señor, con las enseñanzas de Cristo, Maestro, para que en la fiesta de san Isidoro aprendan tu verdad y la hagan vida propia en la práctica del amor. Por Jesucristo nuestro Señor.
Post communionem
Quos Christo réficis pane vivo, eósdem édoce, Dómine, Christo magístro, ut in festivitáte beáti N.tuam discant veritátem, et eam in caritáte operéntur. Per Christum.

MARTIROLOGIO


1. En Roma, conmemoración de san Cleto, papa, que fue el segundo que rigió la Iglesia Romana después de san Pedro (88).

2. En el lugar de Gabio, en el miliario treinta de la vía Prenestina, san Primitivo, mártir (s. inc.).
3. En Amasea, del Ponto, san Basileo, obispo y mártir, en tiempo del emperador Licinio (c. 322).
4. En el eremo del bosque de Crézy, en la región de Amiens, en Neustria, san Ricario, presbítero, que, conmovido por la predicación de unos monjes escoceses, se convirtió a una vida de penitencia (645).
5. En el monasterio de Corbie, también en Neustria (hoy Francia), san Pascasio Radberto, abad, que expuso de modo claro y lúcido la verdad sobre el Cuerpo y la Sangre del Señor en el misterio de la Eucaristía (865).
6*. En Foggia, en la Apulia, santos Guillermo y Peregrino, eremitas (s. XII).
7*. En Aragón, beatos Domingo y Gregorio, presbíteros de la Orden de Predicadores, que, sin llevar oro ni plata, mendigando cada día el alimento necesario, peregrinaban anunciando a todos la Palabra de Dios (s. XIII).
8*. En el monasterio de la Transfiguración, de Moscú, en Rusia, sepultura de san Esteban, obispo de Perm, que evangelizó a los nativos zyrjani, inventó un alfabeto para aquella lengua, en la que celebraba la liturgia, destruyó ídolos, erigió iglesias y confirmó las verdades de la fe de aquellas gentes (1396).
9*. En el monasterio de san Isidoro de Dueñas, en España, san Rafael Arnáiz Barón, religioso de la Orden Cisterciense, que, siendo novicio, enfermó gravemente y, confiando siempre en el Señor, con gran paciencia soportó su enfermedad (1938).
10*. En la aldea de Montjuic, cerca de Girona, también en España, beato Julio Junyer Padern, presbítero de la Sociedad Salesiana y mártir, que, durante la persecución contra la fe, alcanzó por el martirio la gloria de la vida eterna (1938).
11*. En el campo de concentración de Sachsenhausen, en Alemania, beato Estanislao Kubista, presbítero de la Sociedad del Verbo Divino y mártir, que durante la ocupación militar de Polonia, encerrado en durísima cárcel, entregó su alma a Dios. Con él se conmemora también al beato Ladislao Goral, obispo auxiliar de Lublín, que padeció en el mismo lugar por defender la dignidad de los hombres y de la fe, falleciendo en día impreciso, víctima de la enfermedad (1942).