3 de febrero de 2013

V Domingo del Tiempo Ordinario 3 de febrero de 2013 Moniciones





MONICIÓN DE ENTRADA

Se todos bienvenidos a la Eucaristía. Vamos a iniciar la celebración del Cuarto Domingo del Tiempo Ordinario. En él Jesús de Nazaret nos va a dar una enseñanza que ya es famosa para todos. El Maestro lamenta que nadie sea considerado profeta en su propia tierra. El texto de Lucas que escucharemos hoy es continuación del proclamado el domingo anterior. Sus paisanos anclados en viejos prejuicios no quieren admitir, al menos, la evolución que ha tenido su convecino. Y quieren llegar hasta a la violencia para doblegarlo. Resulta inaudito. Oiremos, también, a Pablo que hace un impresionante canto al amor, y que marca, también, la importancia doctrinal de este domingo. Y es que, en estos tiempos difíciles, de grandes zozobras, el amor nos puede salvar. Iniciemos, pues, nuestra celebración con alegría y entusiasmo…

MONICIONES SOBRE LAS LECTURAS

1.- La primera lectura, del Libro de Jeremías, nos muestra, cómo el Señor nos ha elegido a nosotros desde siempre. Cómo nos cuida en medio de tantas luchas, y nos invita a llevar la Palabra, sin miedo, a todos los rincones de la tierra.

S.- El salmo 70 nos muestra la oración de un anciano, de un levita o un sacerdote que pone toda su confianza en Dios, evocando su larga vida. Para nosotros, hoy, nos sirve para expresar la presencia permanente de Dios en nuestras vidas.

2.- San Pablo en su primera carta a los fieles de Corinto, que es nuestra segunda lectura nos expresa que hay una sola cosa: el amor. Es el amor quien mueve la gran aventura de la vida y la fuerza que mueve al hombre y al mundo. El amor es la solución para todos los problemas del género humano.

3.- Nuestra torpeza, como muestra el evangelio de Lucas, está en no querer profetas, sino falsos “superhombres” capaces de sacarnos en soledad llena de soberbia de nuestras equivocaciones, en lugar de aceptar un programa de vida coherente y denso, dedicado a Dios y a los hermanos. Jesús de Nazaret enseña que la salvación es para todos, no solo para unos pocos supuestamente elegidos por su origen o raza.

Lectura de Postcomunión

MONICIÓN

Escuchemos con mucha atención la plegaria que el sacerdote navarro, Javier Leoz, nos ofrece para estos momentos finales de nuestra eucaristía.

HAZTE PASO, SEÑOR

¡HAZTE  PASO, SEÑOR!
Y,  en tu camino, déjanos pistas para seguirte
Amor  para entregar
Pasión  para desvivirnos por los demás
Fuerza  para ser testimonio de tu presencia
Verdad  para dinamitar la falsedad
Alegría  para irradiar optimismo
Palabra,  para iluminar las sombras
Humildad,  para hacer frente a la contrariedad
¡HAZTE  PASO, SEÑOR!
Exhortación de despedida

Hemos escuchado a Pablo de Tarso dar una gran lección sobre el amor. Conviene volver a leerla en casa. Es del capítulo 12 de la Primera Carta a los Corintios. Merece la pena meditar en las palabras del Apóstol de los Gentiles.

MISA CON NIÑOS

Sección realizada por las catequistas de la Parroquia de San Francisco de El Altet, en Elche, Alicante, España, donde es párroco nuestro colaborador, don Pedro Juan Díaz Zaragoza.

MONICIÓN DE ENTRADA

Bienvenidos un día más a esta celebración, hoy descubriremos a Jesús como profeta, y el modo en que fue rechazado por sus propios paisanos, pero a pesar de todo, su obediencia y su fe hacia Dios le hicieron continuar con su misión, que era anunciar la Buena Noticia y dar a conocer a su Padre aún con más fuerza y con mucho amor.

Comenzamos la Misa cantando.

PETICIONES DE PERDÓN

1.- Por las veces que no te acogemos como profeta en nuestros corazones. Señor ten piedad.

2.- Tú que conoces nuestras ignorancias y nuestras debilidades. Cristo ten piedad.

3.- Por esos momentos en que no somos tan fieles y confiados como lo fue María con su hijo. Señor ten piedad.

MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA

En la primera lectura, Jeremías nos explica cómo Dios elegía a los profetas incluso antes de nacer y cómo los protegía ante todo porque era sus elegidos y Él siempre estaba con ellos. Lo único que se les pedía a los profetas, era que confiaran en Dios.

Escuchemos con atención.

MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA

En esta lectura, San Pablo nos habla del amor, que junto con la esperanza y la fe es lo que siempre debemos mantener, pero sobre todo, el amor. Sin amor nada sería posible, las demás cosas son pasajeras, pero el amor ha de permanecer siempre.

En el Evangelio, escucharemos cómo Jesús fue rechazado violentamente por sus paisanos cuando se presentó al pueblo en la sinagoga. Escuchemos las lecturas.

PETICIONES

1.- Por la Iglesia, para que sepa contagiar a todo el mundo su vocación y su fe en Dios dando testimonio del Evangelio con sus obras. Roguemos al Señor.

2.- Por los gobernantes de todos los países, para que sean justos y humanos y guíen a sus ciudadanos con amor y justicia. Roguemos al Señor.

3.- Por todos nosotros, para que sepamos acoger a las personas que están sufriendo gravemente la crisis y seamos solidarios con ellos. Roguemos al Señor.

4.- Por nosotros, los niños y niñas de todo el mundo, para que nunca rechacemos a nadie por lo que hace o dice y tratemos a toda la gente con mucho amor. Roguemos al Señor.

5.- Por todos los aquí presentes, para que en los momentos difíciles y cuando nos sintamos rechazados, como Jesús, no nos hundamos y sepamos reaccionar ante los demás con ilusión. Roguemos al Señor.

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